23 de octubre de 2007

Porque estás tan en mí



No pertenecemos al hoy real; no somos perfectos, es decir acabados.
Seremos nosotros;
nos amaremos;
estaremos, constante,
eterna y unidamente
unidos.
Te olvidaré,
nos olvidaremos
y nos recordaremos;
proclamarás mi vida tuya
y será decir: Tu vida mía.

Te conoceré, lejos de casa
y te abrazaré el viernes
cuando llorarás.
Mis brazos serán tu refugio
y tus ojos serán el mío;

me embriagaré,
te embriagarás
y me besarás
o me embriagarán
tus besos;

nos desnudaremos
y tu piel y tu sexo
serán virgenes
para mis dedos
y mi lengua;

tu regazo
me ofrecerá amor,
y valor y ternura
y calor,
y será, y será

y será mi retorno
a la Tierra,
húmedo de líquido,
agua de amnios
que me protegerá.

Yo te haré llorar
y sufrir
y pasarás horas,
y días
felices a mi lado;

germen
tornará tierra.
Te alejarás
y conocerás
a uno, a dos, a tres,

...a círculos muchos
y te conoceré lejos de casa.
No pertenecemos al hoy real.
El Otro